El vibrante color rojo de las flores de pascua y villancicos nos preparan para la fiesta global que es la Navidad. De niña creciendo en Honduras, recuerdo anticipar con mucha emoción la noche del 24 de diciembre, más que la del 25.
Consentida por la cocina sabrosa Navideña hondureña como montucas, piernas de cerdo horneadas y torrejas, y al ritmo de clásicos navideños como “El Burrito Sabanero,” ese cálido sentimiento permanece y se comparte con otros latinos aquí en Texas y alrededores.
Al contrario de la cultura predominante estadounidense, gran parte de los latinos arrancamos las fiestas navideñas el 24 o mucho antes. No es que los latinos celebremos la Navidad el 24 exactamente, sino que anticipamos esta festividad cristiana con la fiesta de la Nochebuena el 24 de diciembre y “las posadas,” antes de la Navidad que igual la honramos el 25.
Más de 400 años atrás, las posadas fueron introducidas en la cultura latina por medio de los misioneros españoles para contar la historia de la natividad de Jesús. Hoy en día, varios países latinoamericanos como México, Guatemala y Honduras, celebran las posadas en anticipación a la Navidad por nueve días desde el 16 al 24 de diciembre.
Estas festividades representan la búsqueda de posada por parte de José y María antes del nacimiento de Jesús. Durante las posadas, se realizan procesiones, se cantan villancicos y se comparten alimentos entre la comunidad. Cada noche, diferentes hogares acogen a los participantes, recreando simbólicamente el momento bíblico. Estas celebraciones fomentan la solidaridad y la unión comunitaria y cruzan mapas políticos ya que son populares en estados como Texas y California, como la celebración anual de las posadas en el Riverwalk de San Antonio, Texas.
Aunque mi familia y yo no acostumbramos a celebrar las posadas, siempre honramos la Nochebuena y Navidad. Pero confieso que es más festiva la Nochebuena ya que se suena villancicos, música y baile, se comen recién hechitos los platillos navideños en el tiempo de la cena, se toma café para prepararnos a platicar toda la noche hasta que se culmina la fiesta con el intercambio de los regalos a la medianoche. De lo contrario, la Navidad es mucho más relajada. Aun cuando se levanten tarde y se disfrute del recalentado navideño, el tiempo de calidad juntos del 25 es igual de importante y un gran regalo de Navidad.
Las fiestas navideñas son parte importante de la cultura latinoamericana. ¿Y tú cómo celebras las fiestas Navideñas? Comenta, porque nos encantaría aprender de tus costumbres y saber de qué país eres.
